Un poco de historia:
Lientur, a muy temprana edad incursiona en el mundo de
los títeres. En el año 1961, con sólo 14 años de edad, da su primera función junto a su muñeco Pirimpilo
creado por él, que posteriormente da nombre a su compañía, iniciando así, un
largo camino viajando con su teatro de títeres por diferentes comunas de
Santiago hasta el año 1966.
En este caminar, trabaja con
importantes figuras del Teatro de muñecos, como Héctor del Pino, Martha Kalakcy y varias
veces con la inolvidable Meche Córdova, figura pionera y destacada en la
Historia del Títere en Chile.
Siendo estudiante del Liceo Valentín Letelier, participa en el PRIMER FESTIVAL DEL ESPECTACULO
ESTUDIANTIL organizado por la Municipalidad de la Reina y el Canal 9 de Televisión
de la Universidad de Chile, ganando el primer premio en el rubro títeres; esto
constituye un enorme aliciente para fabricar nuevos muñecos y escribir su
primer libreto “MEMORIAS DE PIRIMPILO”, un espectáculo unipersonal para tres
muñecos.
Habiendo ingresado al Conjunto Millaray dirigido por el folclorista
Héctor Pavéz, es invitado a una gira artística con su espectáculo de muñecos,
donde recorre más de 15 ciudades desde Rancagua a Chiloé. De regreso se radica
en Concepción y su espectáculo se difunde en el auditórium de la Radio Simón
Bolívar y la Plaza de Armas.
Pasa el tiempo y nuevos aires soplan en el país. Tiempo de utopías y
de sueños al que no es indiferente Lientur. Como tantos otros intelectuales y
artistas, se integra al Comando de artistas y escritores Allendistas y se suma
a la campaña presidencial participando activamente en los actos culturales que
preceden a la llegada del candidato con un espectáculo de títeres de guante
denominado “Yo también voto”.
Durante la Campaña Presidencial de Salvador Allende se une al Tren de
la Cultura y nuevamente recorre junto a su teatro de títeres, innumerables
pueblitos y ciudades del Sur de Chile junto a otros artistas.
El año 1966 se traslada a Concepción tomando contacto con actores del
Teatro de la Universidad de Concepción, entre ellos Fernando Farías y Miriam
Palacios quienes tenían la Cía. “Los
BULULU”; se integra al elenco una breve
temporada, ingresando al Club de Teatro del TUC y en 1967 da inicio a las
temporadas de títeres con su CIA. PIRIMPILO, manteniéndose ininterrumpidamente
hasta la actualidad con temporadas tanto en Concepción como en las comunas
aledañas y la VII Región.
Ingresa a la Universidad de Concepción a estudiar pedagogía en español
y luego licenciatura en Artes mención pintura y escultura. En 1971, gana un concurso
de profesor ayudante del Departamento de
Asignaturas, técnico artísticas de la Escuela de Educación y participa
activamente en la formulación de la malla curricular para la formación de
Educadoras de Párvulos y docentes de Educ. General Básica, incorporando la
asignatura de Teatro infantil y Teatro de títeres. Colabora como columnista con
el suplemento del Diario Color y la revista de Educación del MINEDUC.
Paralelamente continúa con las temporadas de Pirimpilo y crea la sección
de Teatro Infantil de la Cía. Pirimpilo, la que hasta la fecha está dedicada a
la difusión del espectáculo con títeres de guante, incorporando a los
espectáculos de títeres, actores y muñecos.
Siempre interesado en capacitarse, asiste en Santiago a un curso de
confección de marionetas en el Goethe Institute y durante un tiempo difunde un
espectáculo de marionetas.
En 1977, se incendia su taller y pierde todos sus muñecos; lo que
lejos de desmoralizarlo, lo alienta a buscar nuevas formas para hacer títeres y
así reponer su espectáculo. Junto a su esposa trabajan incansablemente y así
nacen: muñecos de bolsas de papel, objetos en desuso como tazas, tarros, platos,
que servirán para montar un espectáculo
mixto de actores muñecos y objetos.
Lientur Rojas, ha participado en varios festivales internacionales
como LA BUFANDA DEL SOL en Bogotá Colombia, no sin antes tener que realizar una
serie de beneficios y gestiones para lograr asistir. Esto le permite vislumbrar
un mundo de posibilidades, lo que lo motiva a experimentar nuevas técnicas.
Estrena tres espectáculos mixtos y gana un concurso de proyectos culturales municipales
para mostrar la comedia musical para Títeres “LOS CONTAMINADORES Y EL JUICIO DE LOS ÁRBOLES” estrenada en
Colombia, lo que conlleva a tener diferentes invitaciones a festivales
internacionales: Charleville Mezieres en Francia; Madrid, Bilbao, Tolosa en
España; Lima en Perú; Santa fe y Buenos
Aires en Argentina; Ottawa en Canadá; Miami en USA.
Algunas de sus
obras:
A la fecha es autor de más de un centenar de obras para el teatro de
títeres destacando algunas como: El juicio de los Arboles; Los Contaminadores;
Defendamos la Colmena; Don Gato el Campeón; El Gallo Cocorico; Alicia y la
Reina de Corazones; La escuela de los Bichos, Pinocho una nueva Aventura, entre
otras.
Proyecciones como
compañía:
“Creo que aún tengo mucho por hacer en el campo de la difusión del
arte de los títeres, durante algún tiempo me ha preocupado el que
este arte se vea como tal y no como un arte menor, casi artesanal, sin
desmerecer la artesanía como expresión del hombre y su cultura, sin
embargo yo siempre hablo del teatro de muñecos, porque en esencia eso es TEATRO,
con todas las características que el arte dramático posee, vinculándolo también
como una herramienta pedagógica. Mi Compañía. continuará en ese camino
por medio la búsqueda exploración, investigación y experimentación artística.
Ojalá que pueda dejar algún continuador. Tengo fe en mi nieto y en mi
hija que me ha acompañado por 25 años en esta tarea”
Cree por supuesto en la importancia de la capacitación y el perfeccionamiento de este arte: dramaturgia, impostación de la voz, luminotecnia, teoría del color, modelado, pintura, técnicas actorales, que son necesarias y aspectos que todo titiritero debería manejar.
Cree por supuesto en la importancia de la capacitación y el perfeccionamiento de este arte: dramaturgia, impostación de la voz, luminotecnia, teoría del color, modelado, pintura, técnicas actorales, que son necesarias y aspectos que todo titiritero debería manejar.
Aunque su salud ha estado delicada y acusa sus cincuenta años de
trabajo titiritesco, según sus mismas palabras su espíritu no decrece y
mientras tenga vida, habrá PIRIMPILO. Una tarea pendiente es dar término
a un libro que inició hace varios años atrás y dar término a una
antología que espera publicar el 2013.
Proyecciones como UNIMA:
“Una organización que debe fortalecerse con el
concurso de todos quienes podamos aportar”, cuesta que se entienda que es
necesaria la participación activa y que toda organización se
fortalece, sólo, cuando sus integrantes se comprometen en
ella.
Chile y los titiriteros Chilenos necesitamos de una presencia
internacional más potente, “UNIMA es el camino”
Veo con buenos ojos esta nueva fuerza con que aparece hoy y
desde ya, cuenten con todo mi apoyo y aquello en lo que me sea posible
colaborar.
“Un Abrazo
fraterno de este viejo titiritero”