Fundadora
de FAMADIT y Directora Internacional de UNIMA CHILE
Miembro
del Comité Ejecutivo de UNIMA INTERNACIONAL
Introducción:
Conocí a Ana María Allendes en el año 1996 a raíz de un curso de
“Comunicación, Educación y Teatro de Muñecos” que impartía la Universidad Diego
Portales, donde ella fue mi maestra de Muñecos de varilla y
Teatro de Sombras.
Como
tantos otros titiriteros del país, andaba en busca del conocimiento y
perfeccionamiento en este milenario arte, cosa difícil en Chile, ya que no
existen Escuelas de Titiriteros ni menos aún Universidades, como en nuestro
vecino país Argentina, donde es una profesión formal.
¿En qué
año comenzó a practicar el arte de los títeres?
Empecé en
el año 1973, sin embargo desde mi niñez, después de presenciar “La Flauta Mágica” con
la compañía de Marionetas de Salzburgo, que fue cuando decidí ser marionetista,
tenía un pequeño teatro de cartón que aún conservo, donde presentaba diversos
cuentos en figuras planas.
¿Podría
describir brevemente su recorrido artístico y las técnicas utilizadas?
Me inicié
con el títere de guante. En el año 1983 fundé la Compañía de Teatro de Muñecos
Guiñol. Al año siguiente fuimos con la compañía al Festival Internacional del
Chaco - Argentina con la obra “Trilogía del agua” de Verónica Cereceda, única
chilena que había publicado una obra para adultos y que mereció las
felicitaciones de Javier Villafañe. Fui encargada del Área Infantil del Centro
Cultural Mapocho desde 1983 hasta 1990, por lo tanto tenía sala todos los
domingos allí o en otras salas como el Galpón de Los Leones o la Sala Valero, lo que me
motivó a investigar y utilizar diferentes técnicas. En 1988, estrenamos
“Mariana Pineda” de García Lorca en marionetas, con figuras de más de 80 cm. de altura, en un canto
de amor y libertad. En 1990, fuimos al Festival Internacional de la India con
“Las Dos Serpientes de la Tierra del Sur, un montaje en máscaras, sombras,
varillas y figuras planas.
He
participado en diversos Festivales entre ellos, España, Perú, Argentina e
India.
¿Dónde
aprendió estas técnicas?
El títere
de guante lo aprendí en un curso muy básico en el año 1973 en el Instituto
Cultural de Las Condes.
Yo fui
muy amiga de Mane Bernardo, la gran maestra argentina. Viajaba muy seguido a
Buenos Aires a ver a artistas y amigos que no podían entrar a Chile dada la
represión durante la
dictadura. En cada viaje visitaba a Mane y ella con esa
generosidad increíble que tenía, me daba “una verdadera clase magistral”.
Con
sombras fui más bien autodidacta. Mi marido que es periodista y viajaba mucho,
de cada viaje me traía todo lo que encontraba de libros sobre Teatro de
Muñecos.
Para
varillas hice un curso de perfeccionamiento en este tipo de muñecos, con el
maestro uruguayo Javier Peraza, auspiciado por la Universidad de Santa Fe.
Argentina. Para
marionetas me inicié en una visita que hizo Julia Ahumada del grupo Totem de
Suecia, luego hice un taller de perfeccionamiento, dictado por la Cía.
"Die Klappe", a través del Goethe Institut. Pero te
reitero, que más que todo, aprendí investigando y estudiando mucho.
¿Cuál es
su aporte como titiritera en el ámbito del Teatro de Muñecos y en la Educación?
He sido
pionera en este ámbito, como asimismo en dictar cursos y talleres a nivel
universitario. Por otro lado, tengo todos los cursos sobre la Teoría de la Modificabilidad Cognitiva
del Dr. Reuven Feuerstein. Y en el año 1994, recibí una invitación del Dr.
Feuertein a Israel, a dictar una conferencia sobre cómo yo aplicaba el teatro
de muñecos con niños con necesidades especiales. Luego he recorrido todo el
país, como asimismo Argentina y España con la ponencia “El teatro de muñecos
como una herramienta de aprendizaje mediado”. Esta ponencia además fue
publicada en “Reflexiones académicas” N° 6 de la Universidad Diego
Portales.
Usted
forma parte de dos importantes instituciones del país que fomentan el Teatro de
Títeres: FAMADIT y UNIMA CHILE ¿Cuál cree usted que es su importancia?
FAMADIT,
tal como su nombre lo indica, es una Fundación para la Dignificación del Teatro
de Muñecos. Posee una biblioteca única en Chile y la tercera de América Latina,
la cual está a disposición de todos los interesados. Son muchos los tesistas de
diversas carreras: teatro, diseño teatral, comunicadores teatrales,
parvularias, profesores básicos, etc. que han recurrido a ella en busca de
información. Tiene una videoteca con más de setenta DVD que muestran el trabajo
de diferentes países del mundo: Japón, China, Irán, Holanda, Austria etc.
Asimismo cuenta con un museo itinerante que se ha exhibido en museos, colegios,
universidades. Por otro lado, dicta cursos regulares en técnicas de guante,
sombras, varillas, marionetas y títeres de mesa.
UNIMA
CHILE, es filial de la
Unión Internacional de la Marioneta UNIMA,
que pretende unir a los amantes del Teatro de Muñecos del país, sin
distinciones, con el fin de fortalecer este arte milenario.
¿Cuál
cree usted que ha sido el aporte de UNIMA CHILE para los titiriteros?
Por un
lado acogerlos en una corporación que desea trabajar y compartir en paz el arte
del teatro de muñecos, por el otro, contactarlos con diferentes entidades
extranjeras lo que les ha permitido hacer giras a otros países. Aún nos queda
mucho por hacer, pero estamos trabajando en ello.
¿Cuál
cree usted que es el aporte de Unima Internacional para los titiriteros
pertenecientes a Unima Chile?
A través
de la Comisión para América Latina (UNIMA funciona a través de comisiones) se
les ha concedido becas en España para cursos en diferentes técnicas a los
cuales los titiriteros pueden acceder. Asimismo, distribuye sin ningún tipo de
condiciones “La Hoja del Titiritero”, que a través de sus diferentes secciones
es una fuente importantísima de investigación tanto en historia, como en
educación y terapia.
Pero el
aporte de UNIMA INTERNACIONAL va más allá de los titiriteros que pertenecen a
UNIMA CHILE y del ámbito artístico. Durante la dictadura, cuanto tuvimos una
titiritera presa, gracias al gran movimiento que se armó a nivel mundial, donde
incluso el Secretario General solicitó al Papa que interviniera y Michael
Mescke, destacado marionetista sueco logró que Amnistía Internacional la
apadrinara, Mónica obtuvo su libertad.
Por otro
lado, tras el terremoto del año pasado, la Comisión de Cooperación logró una
importante ayuda económica para los titiriteros afectados en la zona Sur y para el Museo
del Títere y el Payaso. Este último también recibió ayuda de la Comisión para
América Latina.
Nadie
preguntó si los favorecidos pertenecían o no a la Corporación.
Finalmente
¿Qué espera como titiritera en lo personal y en lo colectivo?
En lo
personal, que la Fundación pueda mantenerse en el tiempo y pueda seguir
desarrollando la labor que desempeña. En un país como Chile, que no hay aportes
estatales, permanecer vigente es muy difícil. Y además poder cumplir con el
sueño de la sala de teatro propia.
En lo
colectivo, poder seguir ocupando cargos internacionales que me permitan
enriquecer mi labor en Chile y en Latinoamericana. En este momento estoy
trabajando en la versión de la Enciclopedia Mundial de la Marioneta al español.
Entrevista
realizada por Isabel Hernández.
Noviembre
2011.